miércoles, 18 de diciembre de 2019

escala de grises

En mi condición de intensa, sigo, modestamente con bastante éxito en un viaje de búsqueda de puntos medios, de alejarme de que las cosas sean blanco o negro y bañarme en una escala de grises que me refresque y limpie de errores futuros y que en vez de ahogarme, flote pacificamente en el pasado, en el ayer. 

jueves, 13 de diciembre de 2018

Por si acaso.

Salgo del cine, un poco emocionada, por la pelicula, un poco, pero en realidad porque recien empiezo a disfrutar el tiempo que invierto sola. Ir al cine por ejemplo. Asi que feliz.
Salgo a la calle y un viento helado me golpea. Pero apenas lo noto, por la emocion un poco. Tambien porque el cine esta situado en la calle principal de Leeds. Es viernes y hay ambiente navideño. Luces, una feria con la tipica musica de feria en frente de la gran galeria de arte, con una noria chiquita perfilada con luces parpaeantes. Me pongo los auriculares y una lista de reproduccion que se llama "muy tranquilo" porque me lo pide el cuerpo. Camino sola y el momento es lindo. Son 30 minutos a pie hasta casa. Leeds es bastante pequeño y pese al asfalto, tiene muchas zonas verdes, chiquitas tambien. El centro abarca lo que la calle principal y una peatonal que me recuerda muchisimo a paseo de gracia, pero bueno, a la inglesa, con bastante mas lujo.
El camino es todo recto y a los 10 minutos de andar ya no estoy en el centro. Ya no hay ambiente, ni luces, ni mas musica que la que sale de mis auriculares, asi que me saco uno, por si acaso.  Empieza a sonar "Girl - The internet" y el ambiente se antoja un poco como del bronx (?). Sigo caminando. No hay nadie en la calle. Hay una Farola cada mucha distancia aunque tampoco le rindo muchas cuentas. Sigo caminando. Miro atras. Por si acaso. Pasa una brisa helada y me arrugo un poco. Pienso en llegar a casa. Marta, Lorena y el termo de agua caliente que me espera. Sigo caminando, a luz tenue, opaca y naranja. No siento miedo, de echo sigo un poco con la mia, pero un cuarto de mi se incomoda. Miro atras. Por si acaso. Saco el telefono. Mentira, hace rato que mantengo el telefono en las manos. Manos heladas. Hace rato que me parece un buen momento para responder mensajes pendientes. O hablar vanalidades. Levanto la mirada. Por si acaso. Ahora suena "Que me vaya bonito-La otra" y me doy el lujo de cantar en voz alta, porque estoy sola en plena calle. Llego a ese angosto camino. Entre el patio de un colegio y un terrenito repleto de arboles. No hay farola hasta el otro lado de esa callecita, que por el dia, me parece lo mas hermoso del lugar. Me mando, por que yo no tengo miedo. Bueno. Me arrimo lo mas que puedo a la verja del patio. Por si acaso.  Juego a hacerme la valiente, mirar a la derecha y aguantar la mirada. A traves de los arboles hay una luz azulada, la de la noche, vamos. Pero el bosquecito esta completamente negro. Sigo caminando y por fin salgo de la callecita. Miro hacia atras. Por si acaso. Veo a una calle una silueta con la capucha puesta. Normal, llueve un poco. Estupido clima britanico, pienso. Cruzo al otro lado. Por si acaso. Bajo el ritmo y dejo que me adelante. Por si acaso. Pienso que no tengo miedo. Que en estos sitios, no suele pasar nada. Que solo tres veces senti miedo real en un contexto parecido. Tres veces senti que la sangre se me caia a los pies. 
La primera que recuerdo, en una fiesta, situada en un poligono.Recuerdo que, aborrecida por la situacion, me quise ir a casa antes que mi grupo de amigxs. Un poco drogada, reconozco. Cruce una calle ancha y mire hacia atras. Por si acaso. Eran dos. Recuerdo que uno me pregunto si iba muy borracha y si estaba sola. Les dije que ahora me venían a buscar y saque el teléfono. Tire de ingenio.
La segunda, volviendo de trabajar y llegando al portal de un amigo. Me cruce con alguien. Con las farolas sin luz, estaba totalmente oscuro. Mire hacia atras. Por si acaso. Volvia a estar ahi. No tuve miedo. Afloje el ritmo. Lo deje pasar. Por si acaso. Llegue al portal y pique. Sin respuesta, saque el telfono. Por si acaso. Mientras sonaba el pitido de llamada, lo mire. Por si acaso. Se metio en un portal. Me alivie. Tuuuut-tuuut. Segui mirando. Por si acaso. Asomo la cabeza y se me helo la sangre. No tenia rostro por la oscuridad, como en una pesadilla. La pesadilla fue real cuando al otro lado del telefono, no me tomaron en serio. Tire de ingenio.
La tercera, fue lejos de aqui, al otro lado del charco y a plena luz del dia. Mire hacia atras, por si acaso y asi fue. A la tercera vuelta a la plaza, pare en seco y me lo quede mirando. Tire de ovarios.
Repaso todo esto, de camino a casa porque no tengo miedo pero estoy alerta y me viene solo. Estoy llegando a mi barrio. Pienso que es muy britanico.Caigo en la cuenta de que digo m,ucho que el lugar britanico en el que vivo es muy britanico. Que los britanicos son unos sucios que tiran todo al suelo. Despues de un mes caigo en la cuenta que todavia no vi un solo barrendero. Me distraigo pensando. Lorena me dijo que eran muy clasistas. Saco las llaves unas calles antes. Por si acaso. Sigo caminando. Por fin avisto la luz saliendo de mi salon. Miro hacia atras. Por si acaso. Pienso en la estufa, el termo y el calor de las nenas al recibirme. Meto la llave en la cerradura y miro a los lados. Por si acaso. Por fin en casa. Recupero la emocion que tuve al salir del cine.

El por si acaso, en ningun momento de mi vida sono en mi mente y es un representacion de una accion sistematica e involuntaria que siempre estuuvo ahi y que solo se aplican a ese contexto, los demas escenarios son otra historia. Me autoconvenci de que los por si acaso y tirar de ingenio me sacaron de mas de una pero es evidente que fueron golpes de suerte y de que yo no tengo miedo pero por si acaso.


martes, 13 de noviembre de 2018

Desde la reflexion


En mi manía constante de divagar fuerte. Exteriorizo mi reflexión de hoy.

Siento que el primer desamor solo se trata de la rotura de un saco de expectativas e historias, de un idioma colectivo, de esperanzas y de planes futuros en base al otro, del cual tenemos cero control.

Como un edificio en demolición, con el deseo de vivir constantemente en esas ruinas. durante mucho tiempo. Ay, el desapego.

Te pienso muchas veces. Pero no a ti, de ahora, capaz eres alguien parecido. Pero nadie es ya el mismo de entonces. De echo, esto, ya no tiene nada que ver contigo.

En mi, ahora mismo, solo eres un 25 de agosto de 2013; verano en Sants y Gracia; The dark side of the moon; la Luna, GTA 4, Call of Duty y The walking dead; acampadas, excursiones y fiestas; un termo de independiente, eres portugalete y Agallas, el perro cobarde, vueltas a casa de madrugada o ya, de buena mañana; Granada, Portugal, Francia, la ciudad del sol y del buen vino bajo una lluvia constante, Trinitat Vella, Santa coloma de gramanet, el Niño y castillos en el aire como los planes de una futura granja con varios perros.


Pero ahora, eres un montón de cosas que desconozco, de las que soy totalmente ajena. No se quien eres. Y bueno, yo soy un montón de cosas de las que desconoces. Ya no me conoces.
Y de entre todas las disculpas que nos quedaron pendientes y nos debemos, destaco el error de haber valorado mas "lo que seremos" de aquel momento y no el "lo que estaba siendo". Permitir que eso me dejara en segundo lugar.
Si nuestros caminos se cruzaran, nos tendríamos que conocer. De nuevo. Y solo se que si eso pasara, entonces, yo sería mas yo misma, de lo que nunca fui.

(Me gusta pensar que escribo en el contexto de la relatividad, porque no hay nada escrito. Nada es cierto y nada es mentira)

https://youtu.be/ajt7QDRIhZE "Ojala que me vaya bonito"

lunes, 7 de mayo de 2018

Desde pequeñita, en un lecho desestructurado, extraño para algunos, combinando mi propio mundo con el real crecí aferrandome al calorcito del amor que me apañaba, primero hermanos después amigos. Asi que siempre estuve orgullosa de los valores que fui adquiriendo, sola y acompañada, con el tiempo. El de la amistad siempre fue mi máxima prioridad. Esta nunca me falto.

Hasta que, en el transcurso de la vida, con sus subidas, sus bajadas, sus baches y sus cambios, nos fallamos mutuamente. No importan los motivos. Fue un oscuro, asfixiante y extraño transcurso del tiempo. Como cuando 1 minuto dura 1 hora. Pero salí y resurgí.

Ahora, de repente, como ya escribí alguna vez, me siento como una tortuga recién salida del huevo, ante un desconocido e inmenso mar de incertidumbre. Siento algo recorrer mi cuerpo cuando pienso en los próximos cambios y se reconocer que es miedo. Y vuelve a ser extraño afrontarlo sola. Algo comparado a cuando en clase de atletismo, corrías hacia esas vallas. Esa sensación poco antes de saltarla. En un mili segundo pensabas "me la llevo por delante", "no llego", "me voy a caer". Saltarla y correr a por la siguiente.

La novedad da miedo. El cambio da miedo. Dejar atrás da mucho miedo. 
Pero que bien sienta saltar la valla con éxito.

lunes, 16 de abril de 2018

Un pacto para vivir

 Ojalá todo te vaya bien.Ojalá todo te vaya mejor. Ojalá encuentres tu camino. Un camino. Ojalá encuentres alguien que te acompañe. Que no vaya ni detrás, ni delante tuyo, sino a tu lado. Que encuentres la calma a tu alma. Que no sean barriletes de desilusión. Ojalá estés haciendo lo que te llene. Ojalá estés siendo feliz, a tu particular manera. Ojalá no borres jamas esa sonrisa picara. Ojalá enamores a alguien con ella. Ojalá un día nos podamos volver a reunir. Ojalá algún día podamos compartir anécdotas. Ojalá sin barreras emocionales. Ojalá con la misma naturalidad con la que siempre nos tratamos. Ojalá veas las cosas con distinto prisma. Ojalá algún día podamos ser amigos. Ojalá algún día te haya perdonado del todo. Sin necesidad de que me pidas disculpas, algún día. Ni al uno ni al otro. Ojalá, 4 años no queden en vano, perdidos en el tiempo y en la memoria de algunos. Ojalá leyeras esto alguna vez. Ojalá no me dé miedo que lo leyeras. Ojalá sea yo capaz de enfrentarte. Ojalá me enfrentaras. Ojalá aprendas a afrontar los conflictos. Ojalá aprendamos a enfrentar el conflicto, ambos, miedo que nos causó muchos más conflictos a la larga. Ojalá aprendas un montón. Ojala seas un niño grande. Ojalá consigas tu terreno. Tus perros. Tu libertad ansiada. Ojalá nunca tengas que arrepentirte de nada. Ojalá nunca te sientas atado. Ojalá nunca llegues a sentirte como me sentí yo. Y muchos ojalas mas. 

 

 "Cada día sigo sacando espinas, en lo profundo del corazón. En la noche sigo encendiendo sueños para limpiar con el humo sagrado cada recuerdo."

https://www.youtube.com/watch?v=IKmPci5VXz0

lunes, 26 de marzo de 2018

Tenia que escribirlo (23:22)

Durante esos 4 largos años siempre pensé que eramos un equipo. Que habiamos hecho el mejor equipo. Que cuando entrábamos en la área de la vida, juntos centrabamos y marcabamos mutuamente. Para nuestros propositos individualmente, nos teníamos. 
Hoy me doy cuenta de que no, de que de repente yo solo defendía y tu marcabas tus propios goles y yo, desde fuera de esa área, los celebraba contigo.
Gracias a dios, siempre pude adaptarme a otros equipos, a otras canchas, a otras hinchadas. Gracias a mi. Resiliencia.
No es culpa tuya, pero tampoco mía.

domingo, 25 de marzo de 2018

Hablando del tiempo, pasa muy rápido. Y en el transcurso pasan muchas cosas Cosas que necesitan tiempo para ser procesadas. Para entender.  Pero esque el tiempo pasa muy rápido.

En esta nueva etapa de mi vida, me considero una Lavinia nueva. No mejor, sino mas liberada. Digo no mejor, porque hoy día me doy cuenta de los errores que sigo cometiendo conmigo misma. En algún momento estuve enfadada con la anterior Lavinia. Con ella y todo lo que la rodeaba."Que estúpida!" pensaba y rabiaba.

De repente, un día aflojas el cabreo. Te relajas. Enfrías la mente y de repente eres capaz de empatizar.
Hoy, después de relajar y todo eso, entiendo. Entiendo que esa Lavinia necesitaba amar y pero que sobretodo necesitaba ser amada. Así que lo daba todo, absolutamente, sin interés alguno. Y amaba sin interés alguno. Y que no importaba la ansiedad. Y que perdonar era la muestra mas hermosa de amar. Y que por ahí, por eso se torció todo. Porque le falto amarse. A veces hay que tener, para dar.
Hoy me reconcilio con mi yo del pasado y le digo "te entiendo".
Hoy me amo de la misma manera que lo hago con los demás.

escala de grises

En mi condición de intensa, sigo, modestamente con bastante éxito en un viaje de búsqueda de puntos medios, de alejarme de que las cosas sea...